10 Razones para Enamorarse de Londres

Hay millones de razones para enamorarse de Londres. Estas son las 10 razones principales por las que deberías apuntarte al siguiente vuelo con destino a esta increíble capital.

1. ¡Es enorme!

Puedes pasarte toda la vida descubriendo la ciudad y nunca dejarás de sorprenderte. Camden, Kensington y el resto de distritos de Londres, todos ellos tienen sus propias personalidades, pero todos comparten la enérgica forma de ver la vida de la Big Smoke (Londres).

2. El mundo está aquí

Londres es tan cosmopolita como británica, la gente llega atraída por la ciudad desde todas partes del mundo. Esta diversidad ha hecho que Londres se haya convertido en un lugar de infinitas posibilidades. ¿Ver una película en un cine francés? No hay problema. ¿Un brunch en una panadería nórdica? ¿Una cena en un auténtico restaurante mongol? Puedes elegir. La diversidad no solo ha beneficiado a Londres en cuanto a la comida, a lo largo de los años la diversidad ha ayudado a impulsar la creatividad, haciendo que la capital sea un referente internacional en un gran número de campos.

3. Rinde homenaje a la creatividad

Londres ha sido un imán para los espíritus creativos durante siglos. William Shakespeare, Jimi Hendrix y J. K. Rowling, entre otros, lo mejor del mundo del arte se ha inspirado en Londres. Aún atrae a los mejores talentos de la música, arte e interpretación, así como a grandes cómicos y escritores contemporáneos.

Se han escrito y continúan escribiéndose innumerables obras de ficción acerca de las calles de Londres, hogar de obras como las de Sherlock Holmes, Harry Potter y Mary Poppins.

4. La música está en todas partes

Londres se mueve al ritmo de su propia banda sonora. De Ed Sheeran a Adele y de Los Beatles a los Rolling Stones, el Reino Unido ha producido innumerables artistas que han dado forma a la escena musical internacional. Se puede ver un artista cada noche de la semana, elige entre las superestrellas del 02 Arena y los roqueros indie de la histórica Brixton Academy o las bandas nuevas de los bares de Camden. La ciudad cuenta con una serie de festivales musicales de verano, dos de los más importantes son el British Summer Time Festival en Hyde Park y el Wireless en Finsbury Park.

5. La vida nocturna es legendaria

Nunca hay dos noches iguales en Londres. Disfruta de un fascinante musical en el West End o vete a ver la actuación de algunos de los grandes nombres de Hollywood en los cines de Leicester Square. Vete a los modernos bares y restaurantes pop-up del East London, prueba el legendario mundo de los clubs de Londres o canta a todo pulmón las canciones de los mejores grupos nuevos de Londres o de artistas renombrados en el Soho o Shoreditch.

6. La comida te dejará con la boca abierta

Puede que la cocina británica sea objeto de muchos chistes, pero te sorprenderá gratamente lo que Londres tiene que ofrecer. Finos restaurantes, deliciosa comida callejera (puedes encontrar aquí nuestra lista con los mejores lugares) y cocina experimental, todo ello conforma la cocina de Londres, global y en constante evolución. Esto no quiere decir que no puedas tomar un desayuno inglés tradicional o un asado dominical –no adecuado para los que cuentan las calorías–, ¡solo tienes que ir a una cafetería tradicional o a un gastro pub para poder saborear la cocina británica!

7. Y te volverás loco con el deporte

Londres no solo destaca por el fútbol, también es la sede de algunos de los clubes más importantes del mundo. En el Wembley Stadium se juegan partidos de fútbol y también partidos de la NFL que llenan las 90.000 plazas del estadio. El estruendo ensordecedor de Twickenham será más fuerte que nunca este año, así como en Wembley y en el Estadio Olímpico, ya que serán sedes de la Copa del Mundo de Rugby de 2015. Los Juegos Olímpicos de 2012 también dejaron su legado en Londres, puedes llevarte tu toalla a Stratford y darte un baño en la piscina en la que compitió Michael Phelps o, si te ves con valor, dar el salto desde los mismos trampolines desde los que saltaba Tom Daley. Los británicos adoran los deportes y no hay nada más inglés que pasar el día viendo tenis en Winbledon o tratando de comprender las reglas de juego del cricket en Lord’s.

8. Es donde vive la realeza

Es posible que hayas oído hablar de la familia real británica, es como una especie de negocio en el Reino Unido, especialmente en Londres, donde es fácil ver personajes de la realeza. Da un paseo por The Mall, la famosa alameda que conduce al palacio de Buckingham. Ahí se puede apreciar toda la pompa y ceremonia de la tradición real británica del cambio de guardia. Desde el palacio de Buckingham, da un paseo a través de Hyde Park hasta el palacio de Kensington, donde puede que veas a los duques de Cambridge y a los príncipes Jorge y Carlota.

9. Es más barato de lo que te imaginas

Londres no tiene por qué costarte un ojo de la cara, solo tienes que saber dónde buscar y tener nuestra lista de consejos a mano. Un buen lugar para empezar es el aclamado conjunto de museos de la ciudad, que son gratuitos y perfectos para los días lluviosos. La National Portrait Gallery y el Tate Britain acogen colecciones de arte clásico de renombre, mientras que la Tate Modern es un referente mundial en arte moderno. Vuelve atrás en el tiempo en el Museo Británico y en el Museo Nacional de Historia sin gastar un solo céntimo. Cuando esté soleado, puedes pasear por la calle y conocer los mercados de la ciudad, que son de todo tipo y venden productos extraños y maravillosos, es una gran forma de conocer Londres. Por la noche, puedes optar por asistir a conciertos gratuitos o a monólogos humorísticos por toda la ciudad.

10. Los parques son muy zen

Puede que Londres se mueva a un millón de kilómetros por hora, pero es sencillo dar un paso atrás y descansar tranquilamente de su ritmo de vida trepidante. Los parques de la ciudad, al igual que la propia ciudad, están llenos de sorpresas, en ellos puedes encontrar zoológicos, teatros al aire libre y piscinas. Comer al aire libre en uno de los ocho Parques Reales, ir en bicicleta por Holland Park y relajarse en los jardines Kyoto, o ver el perfil de los edificios de Londres desde Greenwich Park o Primrose Hill, todo ello muestra un lado más suave de Londres, pero no menos emocionante, especialmente durante los meses de verano.